El almacenamiento de los archivos es una de las razones elementales para el uso de un programa. El
procedimiento que confirma el almacenamiento del documento en un medio de almacenamiento es el guardado del archivo.
Para guardar nuestro trabajo, podremos usar:
el botón Guardar, representado por el disquete en la Barra estándar;
la opción Archivo » Guardar;
o Ctrl + G.
Automáticamente, se abrirá una ventana donde deberemos indicar el nombre con el cual el archivo deberá ser guardado:
En esta ventana existe un campo llamado Tipo de Archivo. Éste define la extensión que acompañará al nombre del archivo. Teniendo en cuenta que LibreOffice adopta como formato predeterminado el estándar ODF, resulta sencillo identificar los archivos producido con cada uno de los programas que conforman el paquete.
Documento de texto
.ODT (open document text)
Hoja de cálculo
.ODS (open document spreadsheet)
Presentación de diapositivas
.ODP (open document presentation)
Dibujo
.ODG (open document graphics)
Así tenemos que cada formato de archivo está asociado a una extensión .odX. Desde el administrador de archivos, por lo tanto, el archivo aparecerá como <Nombre_Escogido>.odX.
Toda la información que se guarda en la computadora se almacena en forma de archivo, aunque se trate de un trabajo práctico, un dibujo, etc. Cuando se desea guardar un documento hay que tener en cuenta que hay que asignarle un nombre para poder encontrarlo en otra oportunidad. En caso de no hacerlo, LibO Writer le asignará Sin titulo 1, 2, etc. El archivo recibirá automáticamente la extensión ".odX" en cualquiera de los casos. Dado que las computadoras portátiles poseen la última versión del programa LibreOffice, podría suceder que aquellas máquinas que no tengan este programa instalado y que no dispongan de conexión a internet, no puedan abrir tales archivos. En tal caso se puede optar por enviar el archivo como .pdf o acercar a ese usuario una copia de LibreOffice, en un pendrive por ejemplo.